El pasado viernes el Gran Senado aprobó la Ley N°41, que fija la regulación orgánica del Gran Senado. Se trata de una importante normativa que se venía trabajando hace varios meses, y que viene a reformar aspectos que se mantenían idénticos desde el 2018.
La nueva ley viene a simplificar la forma de realizar las sesiones, permitiendo una mejor transcripción de actas, junto con una mayor discusión y detalle de los proyectos en tramitación. Además, permitirá una mejor protección de datos personales de los senadores, como forma de promover la participación de ciudadanos a este organismo.
Anastasio López, ministro de asuntos internos y uno de los redactores de la iniciativa presidencial, afirmó que "con esta ley estamos avanzando en la línea de lo establecido en el Congreso Ideológico de febrero pasado, modernizando una institución fundamental del Estado".
Además fue aprobada una ley vinculada a la anterior, relativa a la publicidad de las leyes que en lo sucesivo sean aprobadas.
Desde el gobierno confirmaron que se trabaja en proyectos para separar las leyes de ministerios y provincias, así como una ley de ciberseguridad, todo ello con miras a delimitar claramente el marco institucional antes de las elecciones de setiembre próximo.
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